Las herencias o el cambio de coche por un modelo más nuevo pueden hacer que los vehículos queden inmovilizados durante una temporada. Sin embargo, estas circunstancias no eximen de algunas obligaciones para ofrecer ciertas garantías al titular del coche en desuso y a terceros.
Los vehículos parados también pueden ser una fuente de daños. Si por causa de un incendio o de un atropello protagonizado por un coche robado y sin seguro se producen daños materiales o personales, las indemnizaciones por los perjuicios causados podrían ser reclamadas al titular del vehículo.
¿Es obligatorio tener el coche asegurado si no lo voy a usar?
La actual legislación establece que cualquier vehículo dado de alta en Tráfico debe disponer de un seguro a terceros. Esto implica que, aunque el coche no se vaya a utilizar, debe estar asegurado.
El motivo es fácil de entender. Incluso los vehículos estacionados pueden ser el origen de un siniestro (p. ej., un incendio), y provocar daños a terceros. Los seguros de coche ofrecen otro tipo de coberturas, aparte de las estrictamente relacionadas con la circulación.
En aparcamientos públicos (p. ej., el de una comunidad de vecinos) o en plazas de garaje privadas en un edificio, el seguro es obligatorio. En fincas privadas y aisladas en las que es poco probable que el coche pueda causar daños a terceros, no es obligatorio, pero sí recomendable.
Por otro lado, los vehículos inutilizados que estén aparcados en la vía pública no solo deberán disponer de seguro sino tener la ITV en vigor. Aunque la Ley de Tráfico y Seguridad Vial es algo ambigua en este supuesto, lo más recomendable es evitar esta práctica y ahorrarse la multa de 200 euros o la necesidad de recurrir dicha sanción (abierta a interpretación).
Soluciones alternativas para los coches en desuso
Existen dos modos de evitar sanciones y otros problemas más graves por tener un vehículo inmovilizado y sin seguro:
- Contratar un seguro a terceros económico. Es posible obtener seguros para coches con precios que rondan los 150 euros al año.
- Proceder a la baja temporal del vehículo en la DGT. Con este trámite no solo desaparece la obligatoriedad de disponer de un seguro, sino que el vehículo quedará exento de pagar el impuesto de circulación.
Con todo, es importante tener en cuenta que un vehículo en desuso estacionado durante varios meses en la vía pública puede considerarse como abandonado. En estos casos se notifica al titular de esta circunstancia y se le da un plazo de 48 horas para que retire el vehículo antes de que lo haga la grúa.